Se buscan diversos esquemas para desahogar el cuello de botella que existe en la cadena de suministros de vehículos.

En esta misma ruta, se reportó que de enero a agosto del año en curso las armadoras establecidas en el país enviaron al extranjero dos millones 123 mil 816 unidades, un incremento interanual de 14%, según datos de la Asociación Mexicana de la Industria Automotriz (AMIA).

Si bien la demanda de vehículos automotrices está aumentando, se enfrenta a desafíos significativos.

Una vez que los vehículos llegan a México o están listos para su exportación, surge la necesidad de trasladarlos a sus destinos para su distribución y venta. Este proceso se ve obstaculizado por la falta de transporte adecuado, como madrinas, y la escasez de operadores en el país. Además, los problemas en los puertos y aduanas se han vuelto más complicados, lo que agrega más obstáculos a esta etapa crítica de la logística en la industria automotriz.

Fuente: T21