Hoy por hoy México es el principal socio comercial de Texas. El país juega un papel vital en la economía texana, tan sólo en 2019 el intercambio comercio entre ambas regiones generó más de 343 mil millones de dólares y más de siete millones de empleos.

Las proyecciones del intercambio comercial para 2050 son exponenciales, pues se prevé que se generen más de 1.5 billones de dólares y más de 20 millones de empleos en ambos países, según cifras dadas a conocer en el Plan Maestro de Transporte Fronterizo Texas-México.

“La participación del sector privado fue muy importante en la conformación del Plan Maestro de Transporte Fronterizo Texas-México, el rol que han jugado es fundamental para conocer sus necesidades y los retos que tienen. En la reunión que sostuvimos con líderes de la industria pudimos compartirles los siguientes pasos para la implementación”, dijo Caroline A. Mays, directora de Planificación y Programas Modales del Departamento de Transporte de Texas, en entrevista con T21.

Por su parte Miguel Elizalde, presidente ejecutivo de la Asociación Nacional de Productores de Autobuses, Camiones y Tractocamiones (ANPACT), explicó a T21 que la industria tanto de transporte pesado como automotriz está muy interesada por participar en la segunda etapa del Plan Maestro de Transporte Fronterizo Texas-México, tal como lo hizo en el desarrollo del documento.

El documento pronostica que la cantidad de vehículos pesados en dirección norte y de cruces de vagones en la frontera entre Texas y México aumentarán exponencialmente, pasando de 5.62 millones en 2019 a 14.9 millones en 2050.

“Estamos en la fase de consolidación, sin embargo, hay mucho trabajo por delante. Por ejemplo, vemos muchos retos en México en términos de infraestructura y en temas de renovación de la flota puesto que, la cadena de proveeduría actual exige vehículos y energéticos cada vez más limpios. Necesitamos contar con flotas vehiculares que se adapten a las exigencias de toda la cadena”, expuso Elizalde.

A su vez, Caroline A. Mays detalló que el sector privado está muy interesado en participar, sobre todo en iniciativas específicas como la instauración de un programa de entrenamiento para conductores y la conformación de un grupo de trabajo ejecutivo Texas-México, “en el que podamos tener como objetivo la implementación de proyectos que fueron identificados en el Plan Maestro de Transporte Fronterizo Texas-México”.

Para Elizalde, la buena noticia es que se está viendo con suficiente anticipación la demanda que se exigirá en el comercio internacional y se han trazado las rutas para hacer frente a esto.

Cabe recordar que la representante del Departamento de Transporte de Texas se reunió en la víspera con integrantes de la ANPACT, de la Cámara Nacional del Autotransporte de Carga (Canacar), de la Asociación Nacional de Transporte Privado (ANTP), de la Cámara Nacional del Autotransporte de Pasaje y Turismo (Canapat) y de la Asociación Mexicana del Transporte Intermodal (AMTI).

Fuente: T21